DEP Paul

Esta noticia me ha llegado al corazón. Ya le teníamos un cariño especial, era alguien muy cercano, alguien al que no podremos olvidar fácilmente. El martes murió y lo menos que yo podía hacer con toda la pena que me embarga es escribir un artículo para ti Paul.
Con sólo dos años, nos ha dejado el pulpo Paul.
Para algunos Paul era un simple pulpo. Para otros era un visionario. Para sus cuidadores una joya. Para los españoles un talisman y para los holandeses algo que no tiene nombre. Para mi era como la bruja Lola pero en bueno. El tío al menos acertaba.

Hablando ya en serio, se ha muerto un pulpo y eso es un notición. Los estandares de calidad de nuestra prensa se resquebrajan. ¿Cómo es posible que esto pueda llegar a ser más importante que la crisis, o que el paro, o que la creación de vacunas contra el sida, o tantas otras?

Hay algo que no funciona en nuestra sociedad. Es cierto que un pulpo adivino es divertido, tiene su gracia. Pero nada más. A mi me caía bien, era más razonable que muchas personas y confiaba más en nuestra selección que la mayoria de los españoles.

Llega un momento que un chiquillo de 12 años no distingue que es lo importante. Cuando va al cole dice: "Se ha muerto Paul!". Ni Chanquete despertó tanta expectación.  Fijaos, hasta yo, he escrito un artículo sobre el cefalópodo en lugar de cumplir con los seguidores de la sección El Origen de las Cosas.

Bueno, sea como sea. Guardaremos en nuestro recuerdo al pulpo Paul cuando digamos dentro de 30 años que España ganó su primer mundial en 2010 y que un pulpo lo predijo. Seguramente la gente se acuerde más del pulpo que del gol de Iniesta o las paradas de Casillas.

Así somos los españoles. ¿Qué le vamos a hacer?

Aur fidensen! ( si era alemán pues habrá que despedirlo así)