De un tiempo a esta parte me he dado cuenta de que hay cosas que me gusta hacer por lo que he decidido contaros algo acerca de mis hobbies.
No sé qué dice exactamente el diccionario sobre lo que significa la palabra hobby. No importa. Para mí, un hobby es una actividad que un individuo realiza con cierta frecuencia porque le gusta hacerlo y, en general, gastando dinero en ello. Es la definición de mi diccionario personal. Desde mi punto de vista, un hobby es algo altamente volátil. Normalmente comenzado a desarrollar una afición con una intensidad muy alta y, poco a poco, vamos dejándolo morir porque en realidad no nos acaba de satisfacer. También hay que decir que puede sufrir repeticiones, es decir, después de haberlo abandonado puede resurgir como el fénix de sus cenizas. Por otro lado, los hobbies requieren de recursos y solo son sostenibles si se dispone de los recursos. Me refiero al tiempo y al dinero.
En mi caso he tenido muchos hobbies y sigo teniéndolos. Hace años me dio por la música de Elvis, lo que me llevo a tener una colección de discos importante. Hace un poco más “mi fiebre“ fue la de coleccionar monedas. También pasó. He tenido aficiones que colean y que el recurso del tiempo me ha obligado a apartar a un lugar muy reducido de mi vida: el baile y el Magic. De vez en cuando, uno se quita el gusanillo pero no se puede mantener el ritmo de otros tiempos. Y, actualmente, tengo otras aficiones. La más importante es el cuidado de mis bonsáis. Es algo que no requiere de mucho tiempo aunque sí de cierta constancia. No se puede dejar de regar un bonsái más de cuatro o cinco días(dependiendo de la época) y pretender que viva. Yo los riego cada día. No os digo más.
Todas mis aficiones tienen una cosa en común: las disfruto. Podríais pensar que con la definición que os he dado algunos conceptos encajan. Por ejemplo, el trabajo. Se realiza con cierta frecuencia, normalmente 5 días a la semana. Hay gente que disfruta trabajando así que podría encajar. Pero un hobby tiene un matiz importante: se disfruta pero no se necesita. Un trabajo, normalmente, se necesita. Cuando no se necesita y se trabaja se convierte en un hobby.
No os quiero aburrir mucho con el tema pero si quiero acabar con una recomendación: tened un hobby. Da igual que penséis que es algo raro, fuera de lo común. No importa! Os ayudará a desconectar del día a día y de los problemas que os atormenten. Será un momento para vosotros que os gustará compartir pero que no necesitaréis hacerlo porque es vuestra elección y, además, con un poco de tiempo os devolverá mucha satisfacción.
Santiago Iñiguez Mallol
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